martes, 25 de mayo de 2010

Esto es eufemismo de una catarsis parcial básica con relación al papel escénico de la vida

Es curioso (de una forma mórbida) cuando miras desde una óptica más distante como transcurren las vidas de las personas con las que te solías relacionar.

Es aun más curioso (incluso gracioso) cuando recuerdas cuando realmente tomabas en serio a esas personas y sus asuntos, que realmente te preocupaba lo que pensaran, dijeran o hicieran, ahora solo el tomo como caracteres de una su propia historia, creo que no me sería tan fácil tomarlos en serio otra vez.

Como “Y” que decía de “X”; X que solía tener un “trabajo” en una “compañía” como modelo de lencería. (Y): y es que X es como el sida, todos lo conocen pero nadie lo quiere tener cerca. Y ahora los veo en fotos por el facebook abrazándose muy afectuosamente en una fiesta, y es que quien no le echaría la culpa al alcohol y a la responsabilidad que trae consigo el estatus social, por eso no vale la pena siquiera cuestionarle la situación.

Recuerdo que de pequeño (mi mamá y algunas maestras solían decirme) que en a hora de recreo pasaba bastante tiempo observando a las hormigas; ahora observo gente, y la magnitud de la situación me resulta similar.

Personas en una obra teatral, es lo que veo ahora; Personas que juegan a vivir. Pues estamos más dispuestos a espectar que a tomar parte de aquella obra que algunos actúan como drama, otros como tragedia y otros pocos como epopeya, yo ahora desde las gradas lo veo más como la señora que mira la novela de las 10, que aunque ya se sabe las mismas patrañas de los guionistas de televisa aun asi, sigue enfrente del televisor.

Su improvisación: hilarante
Su pretensión: ridícula
Convicción: escalofriante
Sus amigos: ingenuos
Mi futuro papel dentro de la obra: no muy alentador

Los objetos cambian según el ambiente en la que se rodean, y dejemos de lado el argumento psicológico y filosófico pero centrémonos solamente en la pura percepción óptica, para así dar un ejemplo más significativo.

Y es que juegan tan bien el papel que si no les quitas la mirada de encima acabas por creerles su cuento, tanto que si ni ellos mismos se quitan la mirada de sí y de sus homólogos que entre ellos acaban por creerse los unos a los otros y a jugar en serio. Como las hormigas con las cuales hacia la analogía, arrebatándose una migaja. Como niños jugando y terminando peleados.

Por supuesto que suena arrogante, pero quién soy yo? Un simple “clerk” de un garden center con salario marginal …y con perspectiva suficiente.

Es gracioso, jugando a tener fiestas, jugando a estar en restaurantes lujosos, mientras se toman fotos con su cámara (de la misma de la calidad de las que vienen con el cereal), su confidente, su amiga traicionera.

Pero sé que tarde o temprano me volveré a esos juegos. No, ni siquiera eso ya que no nunca he sido un buen actor, siempre me pierdo y confundo la letra, además, se que no se me entiende que la culpa no es sólo de mi piñata. Y ya escucharan de mí un “puedo jugar con ustedes en cualquier papel?”

De prestado que quieres? Esto es cosa de locos, de locos.

Ya me veo trantando de esconder mi cara, cuando lean que lo suyo es tan pueril. A este punto ya me empiezan a recordar a los niños pirañas de Venezuela y entonces argumentaré mi incipiente pero oportuno síndrome de tourette. Mendigo del visto bueno de mis amigos.

Marañas en su pequeño reducto, dándole vueltas a su pequeña escena.
Y lo peor no es creer que sus juegos, sino olvidar que hay otro playground.

Lo peor de todo es mi pésima memoria, y no creo que ni los videos ni las fotos n ayuden a tener la certeza de vuelta de la realidad ahí afuera, solo espero no olvidar donde puse los libros, donde guarde la música, o donde se oculta lo que realmente merece la pena prestar atención de. Sólo tendría que asomarme a Granville Street por un par de minutos.

martes, 4 de mayo de 2010

10:30 PM

1030 pm en la comodidad de mi amplia y solitaria mansión se me antoja un pan,

1. Pagar 30 pesos por un mísero muffin de factoría?

Ok, todos sabemos que la vida es un poco más caro, pero $2.45+tax por un mísero panque? Y que si, son sabrosos, pero es que ni siquiera disfrutas mientras que lo comes, pensando en que tienes que pagar 30 pesos. Y con eso viene a mi memoria las bolsas de pan que el abuelo, la tía o mi mamá llevaban. Las donas de 2 pesillos, los huesitos de 1.5, y la repostería de lujo rellena con crema pastelera de a 3.50. Debería empezar a considerar empezar a hornear mi propio pan (no, por supuesto que no, es solo un decir)

2. Ok, digamos que el hambre, aburrimiento y la impertinencia terminan por sacarme de mi cama y ponerme mis zapatos.

Me encuentro en una mediana buena ubicación ya que solo me toma 10 minutos llegar a mi trabajo pasando por escenarios bastantes variados y agradables, empezando por el vecindario donde vivo, pasando después por un túnel debajo de la autopista, un camino en lo alto que me permite tener un agradable vista del océano y que me conduce a la entrada de un bosque de pinos; paso por un rio, rodeo una laguna con loonies, un claro, y finalmente unas escaleras que parecen infinitas, y todo eso en 10 minutos.

Y si a pesar del frio y la distancia me lanzara en misión a riesgo de ser considerado perezoso, encontraría prácticamente imposible  encontrar un lugar (que no sea 7/11, que a pesar esta como a 20 minutos en bici cuesta abajo) que este abierto. Donde quedaron las tienditas de la esquina? O las tiendas del cooperativo en chapingo donde por 60 centavos te llevabas un rico pay de queso casero (60 centavos de dólar, que así se escucha más barato (y que es un problema que tengo que solucionar “1 dólar no es lo mismo que 1 peso, por lo tanto un café de 1.5 dólares no es barato))?

A mis amigos les gustó la ubicación a la cual me mudé, yo no la consideraría a veces tan conveniente.

Por lo tanto me voy a conformar con los recuerdos, mientras preparo una sopa instantánea.

Sí, he extrañado algunas cosas de México, pero estoy seguro que extrañaré la ausencia de algunas peculiaridades cuando este de regreso.

Etiquetas

Credencial Facebook